sábado, 13 de marzo de 2010

Biografia


Nombre real: Avril Ramona Lavigne Whibley
Profesion: Cantante, compositora, actriz, diseñadora y filántropa.
Nacimiento: 27 de septiembre de 1984
Lugar de Nacimiento: Belleville, Ontario (Canadá)

Avril Ramona Lavigne Whibley nació en Belleville, Ontario (Canadá), el 27 de septiembre de 1984 en el seno de una familia católica practicante de ascendencia francesa. Como en otros muchos casos las cualidades artísticas de la joven Avril se hicieron públicas y notorias a raíz de su participación en el coro de la iglesia local.

Con tan sólo doce años Lavigne comenzó a acariciar el sueño de dedicarse profesionalmente a la música y aprendió a tocar la guitarra (autodidacta); decidida y emprendedora, su oportunidad no tardaría en llegar, y así fue como en 1999 cantó para un disco del productor Stephen Medd, con el que repetiría al año siguiente grabando otras dos pistas: "Fue increíble", recuerda Medd. "El corte que se escucha en el disco fue hecho de una única toma. Esta chica de 14 años, que nunca había estado en un estudio, entró como una profesional e hizo un trabajo impecable; me dejó completamente pasmado."

Pero Avril seguía buscando triunfar por sí misma de manera que grabó un tema de Shania Twain en una cinta de casete y la envió a un concurso local, que evidentemente ganó, obteniendo como premio su primera gran actuación a dúo con la mismísima Shania junto a la que cantó “What may you say that”.

Tanto trabajo e iniciativa no podían pasar desapercibidos, de manera que al poco tiempo, el manager de artistas Fabri contactó con la joven y grabó con ella una maqueta bastante doméstica que enviaría a tantas discográficas como pudo: "Lo que me atrajo no fue su voz, su físico o las canciones; fue su actitud, su confianza", comentaría Fabri. Mientras, para ayudarla a definir su estilo, envió a la joven a Nueva York para colaborar con el productor y compositor Peter Zizzo. Ya sin su primer manager, Fabri (nunca se han desvelado públicamente las razones de la separación) finalmente la cantante firmaría con Arista Records con los que conseguiría desarrollar un estilo propio (a medio camino entre el punk y el rock intentando bordear el terreno demasiado comercial), algo absolutamente novedoso en el saturado y repetitivo mercado discográfico estadounidense.

Su primer disco “Let Go” vería la luz el 4 de junio de 2002 y sorprendentemente entró directo a la prestigiosa lista Billboard. Pero Avril se descubrió además como un talento proactivo, ya no sólo cantaba, sino que insistía especialmente en componer sus propios temas. "Siempre escribo. Así es como trato con mis emociones y pensamientos. Si todo esto acabara todavía me sentaría en mi computadora a trabajar en mis canciones. Es muy importante para mí y estoy muy emocionada por comenzar a trabajar en mi segundo álbum." Hasta la fecha se han vendido más de 18 millones de copias de este primer disco.

Tras el rotundo éxito de su primer trabajo Lavigne sacó su segundo álbum de estudio en 2004; “Under my skin” debutaría como Top 1 en la Billboard. Para este nuevo disco contó con la colaboración de reconocidos cantantes y compositores: entre otros Chantal Kreviazuk, Ben Moody (ex guitarrista de Evanescence), Butch Walter y Evan Taubenfeld. El sonido de Lavigne comenzó a evolucionar sutilmente abandonado el punk más alternativo tan representativo de sus comienzos; no obstante gracias a “Under my skin” obtuvo numerosos premios y galardones internacionales que la avalaban no ya como una joven promesa, sino como una auténtica artista.

Su tercer trabajo “The best damn thing” fue lanzado el 17 de abril de 2007 ante el desconcierto y enfado de sus fans que no aceptaron el radical cambio de registro de la cantante en este nuevo disco (producido entre otros por su marido, Deryck Whibley, cantante del grupo Sum 41, y con quien contrajo matrimonio en julio del 2006).

Ciertamente Lavigne, a pesar de dejarse llevar en ocasiones por la vorágine mediática (recordadas son sus incongruentes declaraciones criticando a su compañera Spears por posar desnuda mientras ella hacía lo propio en una publicación de similares características) es un caso atípico en la industria discográfica norteamericana, una personalidad ajena a los medios y a los rumores, con una vida privada relativamente desconocida y poseedora de un innegable talento que, a pesar de haber perdido seguidores en el proceso, ha evolucionado a un sonido más rotundo y personal que el pretendido rock/punk pretendidamente, o comercialmente alternativo, al que se acostumbró, o se acomodó, en sus dos primeros trabajos.